La acequia del Rey fue el cordón umbilical que nutrió de vida durante siete siglos a la fortaleza de la Alhambra, a sus huertas y a sus jardines. Con la mayor rigurosidad científica, la obra deja constancia histórica del que fue su trazado, de sus instituciones, ordenanzas, servidores y beneficiarios, abriendo paso a otros trabajos que acaben por recuperar la memoria de su pasado esplendor.