No dejan de publicarse libros sobre Auschwitz y en general sobre el Holocausto nazi contra los judíos porque seguimos haciéndonos preguntas e intentando comprender cómo fue posible que algo así llegara a producirse, es decir, el porqué.
Cada libro que se ha escrito y escribirá contribuye o desvelar las causas que condujeron a este genocidio ocurrido durante la Segunda Guerra Mundial.
Repasamos la bibliografía existente para recuperar algunos de los trabajos más exhaustivos realizados por historiadores, que han ido arrojando luz sobre esas causas, a través del relato de lo que pasó (once millones de personas murieron, entre ellos seis millones de judíos) y cómo pasó.
Si en el post libros sobre el Holocausto recopilamos algunos de los títulos más emblemáticos que nos acercan a este incomprensible episodio de nuestra historia, aquí ponemos el foco sobre Auschwitz.
Ubicado en territorio polaco, a 43 kilómetros de Cracovia, fue el mayor centro de exterminio.
Un millón cien mil personas murieron en sus instalaciones, durante los cinco años que estuvo funcionando. Se abrió el 20 de mayo de 1940 y el 27 de enero de 1945 era liberado por el ejército soviético.
Hoy podemos ver el campo de exterminio a vista de dron.
Unas imágenes inéditas del campo de exterminio nazi de Auschwitz-Birkenau
Y también conocer detalles de cómo transcurrían los días en él.
La ¿vida? en Auschwitz, ¿qué vida?
Es lo que retrata el profesor de historia moderna de la Universidad de Londres Nikolaus Wachsmann en el libro K.L. Historia de los campos de concentración nazis.
La experiencia cotidiana de víctimas y verdugos que ha podido reconstruir, tras estudiar durante años los archivos, a partir de lo percibido por los sentidos de quienes estuvieron en él: el espacio, los movimientos, olores, el clima y los cambios de temperatura, los sonidos y, por supuesto, las emociones, siempre reprimidas.
Una reconstrucción de Auschwitz desde dentro que pone ante nosotros el infierno vivido.
Similar perspectiva adopta Paz Moreno Feliú, catedrática de Antropología Social de la UNED, en su investigación En el corazón de la zona gris. Una lectura etnográfica de los campos de Auschwitz.
A partir de los testimonios fragmentarios de los supervivientes (víctimas y verdugos), reconstruye la cotidianidad sufrida: relaciones sociales, jerarquías, intercambio entre prisioneros, los procesos de deshumanización de las víctimas, la economía del tiempo y los interminables sucesos.
Un libro que nos invita a reflexionar sobre las omisiones y silencios.
Los relatos de Auschwitz y de aquella no vida
Silencios que los supervivientes han intentado ocupar con sus testimonios y que han venido configurando la detallada bibliografía existente de libros sobre Auschwitz.
Todos ellos, obras clásicas de la historia del Holocausto.
Es el caso del escritor Primo Levi, cuya trilogía de Auschwitz seguro conoces y habrás leído.
A él debemos también el informe Auschwitz, escrito a petición de los soldados soviéticos tras la liberación y que se recoge en el libro Así fue Auschwitz. Testimonios 1945-1986.
El informe Auschwitz fue uno de los primeros textos escritos sobre los campos de exterminio y el antecedente de la obra posterior de Levi.
La lectura de los testimonios de los supervivientes nos aproximan, por tanto, a los hechos y al sinsentido de los hechos pero también al conocimiento profundo del hombre y su trascendencia.
El psiquiatra y escritor Viktor Frankl, que pasó también por Auschwitz, une memoria y análisis de la capacidad del hombre de trascender en El hombre en busca de sentido.
Reflexiones que emergen de las palabras de todos los supervivientes que han podido recordar, como las de Annette Cabelli, recientemente fallecida y a la que escuchamos en este video.
Recogidas también en el libro publicado por la Universidad de Navarra, Auschwitz en primera persona.
Uno de los últimos testimonios en conocerse ha sido el del médico Eddy de Wind, escrito en el propio campo y que vio la luz tras una exposición celebrada en Madrid.
Auschwitz, última parada. Cómo sobreviví al horror, cuanta la historia de un joven médico judío que, tras conocer que su madre ha sido enviada al campo de Westerbork, decide seguirla y presentarse voluntario para trabajar allí.
Pronto es trasladado a Auschwitz, junto con la enfermera de la que se enamoró y casó en el propio campo.
Historiadores en Auschwitz y frente al Holocausto
Estudiar el Holocausto ha sido posiblemente uno de los mayores retos de los historiadores.
Y sus trabajos, no siempre aceptados, lo evidencian.
Es el caso de las investigaciones realizadas por el historiador austriaco Raul Hilberg, recogidas en el libro Memorias de un historiador del Holocausto, publicadas en 2020 en castellano.
Hilberg, inmerso en el estudio del Holocausto cuando nadie quería oír hablar de él, defendió en su tesis doctoral la necesidad de que, para entender el Shoah, había que estudiar los mecanismo burocráticos del exterminio.
Y planteó una idea que, como le predijo su director de tesis, era difícil de aceptar.
La tesis del historiador apuntaba a la cooperación de las víctimas en su propia destrucción, a través de los Consejos Judíos.
Puedes escuchar sus teorías en esta entrevista.
El debate continúa aún hoy.
El libro Víctimas y verdugos en “Shoah” de C. Lanzmann. Geneaología y análisis de un estado de la memoria del Holocausto, publicado por la Universitat de Valencia, es un ejemplo de cómo se sigue debatiendo académicamente sobre el retrato de víctimas y verdugos a lo largo de las distintas formulaciones que se han ido produciendo.
El papel de la burocracia del estado, sin la cual el crimen en masa no habría podido producirse, es la propuesta del editor de la Revue d’histoire de la Shoah, George Bensoussan, en su libro Auschwitz por herencia.
En su opinión, la ideología sola no produce el crimen de Estado, la tecnología y la burocracia contribuyen a ello.
El también historiador Saul Friedlander, en su estudio de las causas, se fijó en lo que tuvo de insólito el antisemitismo alemán bajo el nazismo, dentro del antijudaísmo que se experimentaba en el resto de Europa.
El nacionalismo alemán que aparece a principios del XIX y el considerar a los judíos como portadores de todas las enfermedades llevó a cambiar la política de expulsión por la de exterminio, ya que se trataba de salvar al mundo entero.
Sus investigaciones están recogidas en ¿Por qué el Holocausto?
Otro dato lo aporta el investigador Florent Brayard en Auschwitz: investigación sobre un complot nazi.
Sus estudios concluyen que la masacre de seis millones de judíos se realizó por etapas, con gran secretismo y con una distinción entre los judíos occidentales y los judíos del este.
La filosofía ante Auschwitz y el Holocausto
Por su parte, la filosofía ha intentado interpretar las lecciones el Holocausto judío y si hablamos de libros sobre Auschwitz no podemos olvidar la aportación de los filósofos.
Ejemplos próximos los encontramos en Reyes Mate, que ha dedicado los últimos años a estudiar el significado de la barbarie.
En Memoria de Auschwitz. Actualidad moral y política encontramos parte de sus conclusiones.
Para el filósofo, el Holocausto no fue la obra de un loco sino el final de un proceso que compromete a lo mejor de la civilización occidental.
Sigue su estela Joan Carles Mèlich, profesor de Filosofía en la Universitat Autònoma de Barcelona, en el libro La lección de Auschwitz.
Para este pensador, Auschwitz cambió la historia del siglo XX.
Nada ha vuelto a ser lo mismo, ni la cultura, ni el arte, ni la filosofía, ni la ética, ni la pedagogía…
Educar después de Auschwitz
Precisamente uno de los grandes interrogantes que deja Auschwitz es cómo educar tras el genocidio, “sabiendo que la cultura no nos librará de la barbarie”.
El libro Educar contra Auschwitz, del profesor de historia Jean Francoise Forges, intenta responder a esta pregunta de enorme trascendencia.
Y con él y con la esperanza que representa la educación completamos esta bibliografía de libros sobre Auschwitz.
Todos ellos #librosparacomprender
Si quieres ampliar las lecturas de este momento histórico, puedes consultar nuestro post Libros sobre la Segunda Guerra Mundial.