Las historias de crímenes por resolver, pistas insondables y carismáticos detectives de mentes brillantes están de actualidad. Sólo hace falta darse una vuelta por cualquier plataforma de vídeo bajo demanda como Netflix o HBO.
Quizás no hayan dejado de estarlo nunca…
Novela policiaca vs. novela negra
Ya os hablamos anteriormente de la novela negra. Y si bien es cierto que a menudo se emplean ambos términos para designar novelas de crímenes y misterios en general, existen algunas diferencias.
La novela policiaca encuentra muchos puntos en común con la novela negra, pero hay matices.
Podemos destacar principalmente que en la novela policiaca, policial o detectivesca la resolución del misterio o el crimen es el objetivo principal, mientras que en la novela negra no.
Además, en la novela policiaca el desarrollo de la trama es casi matemático. El protagonista va analizando una serie de pistas siempre tirando de psicología, y hay en sus métodos cierto barniz intelectual…
Los albores de la novela policiaca
Se puede considerar que el pistoletazo de salida lo da Edgar Allan Poe con Crímenes de La calle Morgue (1841).
Este cuento es el primero conducido por el detective aficionado Chevalier Auguste Dupin, quien gracias a sus sesudas e inteligentes pesquisas consigue dar con las respuestas de quién y cómo se cometieron los crímenes de la calle Morgue.
A partir de su magnifica presentación Dupin protagonizará otros muchos relatos de Allan Pue entre los que cabe destacar El Misterio de Marie Rogét (1842-43) o La carta robada (1844).
Por otro lado, Arthur Conan Doyle junto con Agatha Christie y otros autores fueron los precursores de la escuela inglesa de novela policiaca.
Lo que está claro es que la sombra de C. Auguste Dupin, Sherlock Holmes o Hércules Poirot, tres de los personajes de ficción más famosos de todos los tiempos, está presente en innumerables novelas y relatos policiacos y de misterio que vinieron después. Muchas de ellas también sagas.
Tradición policiaca inglesa
La británica Sophie Hannah directamente devuelve a la vida al famoso Hercules Poirot en su novela Los asesinatos de Kingfisher Hill.
La presencia de Poirot es requerida en la lujosa mansión Kingfisher Hill, pues su propietario necesita su ayuda para demostrar que su prometida, Helen, es inocente del asesinato de su hermano.
Durante su trayecto en un exclusivo autocar, una joven sufre un ataque de nervios y exige apearse: afirma que si permanece en su asiento será asesinada.
Las dos historias en apariencia sin conexión se entrelazarán a lo largo de la novela en un magnífico juego de las sillas, muy del gusto de Christie.
Tartan noir
Los escoceses han sabido recoger a la perfección el testigo de la novela negra con una fórmula única y especial, tanto que derivó en el subgénero conocido como Tartan noir.
Este se caracteriza por su visión insolente y desmembrada. Sus protagonistas son antihéroes, con los que el lector no tiene necesariamente que empatizar.
Ian Rankin es uno de sus mayores exponentes en la actualidad.
En su primera novela, Nudos y cruces (Knots and Crosses, 1987), ya nos introduce a su inspector Rebus, protagonista de gran parte de sus novelas.
En 2018 publicó su última entrega de la saga de Rebus, que como es costumbre empieza con un cadáver y un montón de incógnitas.
Entre ambos libros ha publicado la friolera de 21 títulos, 21 casos resueltos magistralmente por el inspector.
Antes que él, William McIlvanney, otro escritor escocés, había triunfado en los años setenta con sus novelas policiacas protagonizadas por Jack Laidlaw, un inspector duro, pero que esconde una gran humanidad e inteligencia. Estas se consideran precursoras del Tartan noir.
Uno de estos libros es Los papeles de Tony Veitch, recientemente ha sido recuperado por Salamandra Black.
En él Laidlaw tiene que indagar tanto en las clases más acomodadas como en los bajos fondos de Glasgow para desenredar una trama compleja trama de corrupción.
McIlvanney fue el maestro de muchos como Ian Rankin, Val McDermid y Pierre Lemaitre.
El testigo francés
Otro de los grandes nombres de la novela policiaca actual, de sello francés, es Pierre Lemaitre.
Desde su primera novela, Travailsoigné (2006; publicada en español con el título de Irène), rinde homenaje a sus maestros: Bret Easton Ellis, Émile Gaboriau, James Ellroy, William McIlvanney, etc.
Esta obra marca también el comienzo de su serie policial que tiene como protagonista a Camille Verhoeven, comandante de la Brigada Criminal de París, de sólo 1,45 metros de altura, discreto y meticuloso, para no perdérselo.
Novela policiaca versión española
En nuestro país también se han escrito últimamente muchas y buenas novelas que perfectamente encajan en la categoría de novela policiaca.
Santiago Díaz nos sorprende con su segunda novela, la primera de la inspectora Indira Ramos.
Un año después de que un hombre fuera detenido tras encontrarle con sangre junto al cadáver de su mujer en su chalet de Madrid, su padre acude a la policía, afirma rotundamente que su hijo no es el culpable y que deben encontrar al verdadero asesino de su nuera…
El buen padre avanza a velocidad de vértigo, pues Indira Ramos cuenta sólo con tres semanas para resolver el caso.
El escritor catalán Toni Hill, autor de la saga sobre el inspector Héctor Salgado, regresa con esta historia que comienza con el recuerdo del suicidio de una inmigrante.
Las cinco protagonistas de esta novela son mujeres profesionalmente bien posicionadas que viven de forma acomodada. Pero al verse involucradas en un crimen sus privilegios e integridad moral podrían estar en peligro.
Otro gran exponente europeo de la novela policiaca
Este año se cumple el centenario del nacimiento del escritor suizo Friedrich Dürrenmatt, autor de novelas policiacas, además de obras de teatro, ensayos y textos para radio, con los que se ganó la vida hasta que la crítica comenzó a remar a su favor.
Uno de ellos fue El juez y su verdugo en el que aparece su comisario Hans Barläch, que empieza a desentrañar el caso de la muerte de un policía con la ayuda de otro agente. Pronto el juez instructor, Lucius Lutz, viejo conocido del comisario, le insta a que capture al asesino…
Esperamos haberte dado buenas ideas de lecturas para este verano.
¡A disfrutar!