Acercarse a las nociones de 'justicia' y 'derecho' en los Padres de la Iglesia es hoy una tarea plagada de peligros. No sólo nos enfrentamos con una concepción del mundo y del hombre, la patrística, de neto talante cristiano y antiguo, muy alejada de nuestras coordenadas modernas del pensar; sino que, además, aquél que espere encontrar en los autores cristianos antiguos algo parecido a una síntesis o a un sistema completo y cerrado sobre estas nociones, puede llevarse una desagradable sorpresa.