Si estás en el paro, posiblemente tienes o has tenido un cierto sentimiento de culpa. Esta sensación de sentirse culpable, aunque el despido se deba a causas completamente ajenas a la propia voluntad o actitud, es muy común y desafortunadamente no hace más que agravar una situación que, como punto de partida, no es positiva. El mundo del trabajo ha experimentado cambios dramáticos y no sólo como consecuencia de la coyuntura económica, los trabajos para toda la vida se han convertido en historia pasada, algo que les sucedía a nuestros padres y abuelos. El concepto de carrera profesional ha cambiado radicalmente durante los últimos años, la concepción tradicional hasta no hace mucho tiempo era que una persona se incorporaba a una empresa con la expectativa de jubilarse en esa misma empresa, en la que iría ascendiendo a lo largo de los años. Actualmente la situación es bien distinta, ni las empresas se casan con los empleados, ni éstos se casan con ninguna empresa.