El presente libro reúne en sus páginas algunas anécdotas médicas digna s de contarse, como la de llamar al pediatra pederasta, o la de confun dir una biopsia con una autopsia, o ir al dentista con -pedorrea- en v ez de piorrea.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información