La reflexión acerca de los lugares en los que se muestra el arte, bien sean museos u otros centros expositivos, centran el contenido de este libro. Igualmente, muestra otro tipo de espacios –no necesariamente intramuros– en los cuales, de forma provisional o permanente, se hace o representa arte. Todo ello desde la óptica feminista y los debates de género. Más allá de los necesarios aspectos cuantitativos para saber el lugar que ocupan las mujeres en el sistema del arte, se ha querido incidir en aquellas experiencias que han sabido reflejar la situación que ellas ocupan en ese sistema. Se busca, igualmente, abordar los objetivos desde una perspectiva descentralizada, tanto en un sentido literal –los lugares del no-centro– como ideológica –subvirtiendo los cánones que convierten a determinados grupos humanos en los hacedores del canon.