La prudencia, la sensatez, la cercanía, han sido rasgos de una persona que ha dado su sabiduría con generosidad, naturalmente. De una persona que además ha sido, es, un profesional del derecho excepcional: José Soto García-Camacho. Como Notario, entrañable, como profesor de generaciones de abogados en la Escuela de Práctica Jurídica.
Este es un libro en su memoria. Sobre una materia que estudió, que aplicó, sin dogmatismos, con profundo respeto.
Su trabajo -La práctica del fuero del Baylío y su realidad social-, expuesto en la Asamblea de Extremadura, presiden este libro en su memoria, muestra junto a esa sabiduría resaltada por muchos, esas otras muchas virtudes que le caracterizan: generosidad, respeto. Profundo conocimiento.
Decía -Llevamos discutiendo más de cien años, las doctrinas y posturas se multiplican y amplían o modifican constantemente, y parece como una obligación el que cualquier jurista que tiene un contacto bien práctico, bien por lecturas o referencias, tenga que escribir sobre el Fuero. Yo tuve esa misma sensación en mis primeros contactos con la realidad, pero pensé al final que era mejor aprender que enseñar, y que sólo cuando fuera mayor escribiría algo sobre el Fuero. Mantuve esta postura hasta mi Informe, que lo fue en virtud de providencia judicial para un caso concreto y con los inconvenientes que tiene todo lo excesivamente breve y conciso, y sin embargo, ahora que soy realmente mayor, he caído en la tentación de escribir algo sobre el Fuero-.
Su sencillez, su humildad, su alegría, han quedado entre nosotros, así como su excepcional valía como profesional del derecho .
Falleció el 17 de febrero de 2011, en Badajoz , en su casa de la calle San Blas. En su recuerdo se edita este libro, desde el profundo respeto.
