CASTRO-PÁEZ, ENCARNACIÓN; CRUZ ANDREOTTI, GONZALO (EDS.)
Las contribuciones de este volumen en homenaje al profesor Francesco Prontera están unidas alrededor de una idea central: la íntima conexión entre la delineación y la evolución del mapa con el suceder histórico y los presupuestos geográficos que marcan su evolución durante toda la Antigüedad grecoromana y la herencia posterior. El mapa, como herramienta, está cargado de intencionalidad, puesto que contribuye tanto a describir la realidad como a analizarla. Como dibujo, es solo una imagen fija en el tiempo y en el espacio, susceptible de ser modificado si nuevas condiciones propias o ajenas así lo exigen. Como tradición, sirve como soporte para establecer lazos culturales entre el pasado y el presente. Es un instrumento de percepción.