FERNÁNDEZ DOMINGO, JESÚS IGNACIO
El presente libro intenta romper con la inercia que parece supeditar las relaciones de vecindad (entendidas tanto en el sentido de contigüidad como en el de ´buena vecindad´) a las servidumbres, respecto de las que el autor vuelve advertir sobre su naturaleza de gravamen.
A partir de la distinción entre lo que constituye la -tolerancia- sin más -deber de soportar ciertas inmisiones, en aras a unas buenas relaciones de vecindad-, y la ´mera tolerancia´, en la que no se encuentra ninguna situación que deba soportarse, ´sino que ha sido expresamente querida, consentida por los particulares interesados´, va poniendo de relieve el antagonismo existente entre la tolerancia y las situaciones posesorias.
Entiende el autor que, frente a los elementos objetivos de la servidumbre, deben mantenerse el subjetivo y el económico (interés, utilidad, etc.) e, igualmente, la presunción ´iuris tantum´ de la tolerancia, consistente en una actitud, en un ´dejar hacer´ que, en todo caso, ´no afecta a la posesión´, como explicita claramente el Código civil. Con ello, la pretendida usucapión de las servidumbres queda en entredicho, a la vez que se sugiere una reclasificación de éstas y se suscita la idea de imponer, como su único modo de adquisición, la existencia de un título.