Nápoles, 14 de febrero de 1990 El primer disparo le alcanzó en los testículos. Roberto Nuvoletta, Il capitano, capo de la ´Camorra Organizzata´, el más poderoso clan de la mafia napolitana, soltó un aullido y se retorció de dolor. Luego, recibió otros tres impactos: uno, en un brazo con el que pretendía protegerse; otro, en la espalda, al voltearse, y el tercero, en la cabeza a cañón tocante, que le causó la muerte inmediata. Giulietta Mazzarella concluyó su ataque con un solo disparo en el pecho a la rubia que compartía el lecho con su marido.