Al Libro quarto Viciana narra la revuelta de las Germanías desde un punto de vista nobiliario que no le impide reconocer el mérito de los adversarios. Es una crónica del movimiento agermanado desde la génesis hasta la venida de la virreina Germana de Foix, con unas breves notas sobre la represión antiagermanda. La crónica está escrita con la firme voluntad de comprender todo el movimiento de forma global. Viciana explica como se inició el movimiento agermanado a la ciudad de Valencia y desde allí se irradió al resto del País Valenciano. Relata la gestación de la Germanía en las diversas ciudades valencianas a partir de una información de primera mano, que obtiene desde archivos particulares y públicos, entre los que hay que incluir la correspondencia del entonces virrey del reino, el conde de Melito. En la narración de la revuelta, Viciana dóna voz a los principales personajes agermanados y dedica palabras elogiosas a su principal ideólogo, Joan Llorenç, en claro contraste con las otras crónicas de la Germanía. A pesar de la visión profundamente monárquica del historiador, no deja de reconocer positivamente las calidades de los protagonistas agermanados, tanto en el ámbito del gobierno como a los actos de guerra que protagonizaron. Lo obra incluye numerosos documentos de ambas partes, muchos de ellos perdidos, que sólo conocemos a través de la crónica de este autor, sobre todo los emitidos por el sector agermanado. Es una crónica donde por primera vez se ofrece al lector la documentación necesaria para que obtenga sus propias conclusiones sobre estos acontecimientos. Una interpretación de los recursos históricos muy avanzada para su tiempo.
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