EL PADRE VÁZQUEZ. UN DOMINICO UNIVERSAL

EL PADRE VÁZQUEZ. UN DOMINICO UNIVERSAL (Libro en papel)

Editorial:
TREA
Año de edición:
Materia
Historia
ISBN:
978-84-9704-472-1
Páginas:
160
Encuadernación:
Rústica
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Fray Francisco Vázquez (1868-1956), el padre Paco, es uno de esos asturianos universales a los cuales la desmemoria lo tenía relegado en el olvido. Eminente dominico, nacido en 1868 en Olloniego, pueblo de la cuenca minera asturiana, formado en los monasterios de Corias y Padrón, junto a su vocación y tarea de misionero fue psicólogo y agrónomo, además de escritor y articulista; hijo de su tiempo, inició en los albores del movimiento obrero su andadura pastoral en el pueblo almeriense de Cuevas del Almanzora, donde se dice que se organizó por primera vez el primero de mayo en España, y tuvo posteriormente una destacada trayectoria en Cuba, donde residió de 1903 a 1922, donde realizó una ingente labor impulsando el convento y la construcción de la iglesia de San Juan de Letrán, y donde fue partícipe, junto al diputado Aramburo, del primer Código del Trabajo de América latina, en 1917, y de la creación de la Academia Católica de Ciencias Sociales, instituciones que permanecen vigentes en la actualidad en La Habana.
Tras su paso por la isla caribeña, realiza su misión pastoral por diversos países de América, culminando su obra en Perú, donde pasa la última etapa de su vida. Crea el Estudio General Internacional del Cuzco y es declarado -segundo restaurador de la provincia- en el año 1953. En Cuzco fallece en 1956, tras dejar una estela de acciones ejemplares, descritas en este libro, como su dedicación a lo que denominaba la -enseñanza de la verdad a los hombres-, en el respeto al otro y el aprecio a la riqueza de las culturas.
Compañero en sus inicios de otros reconocidos intelectuales de la Orden dominicana como los padres Gafo y Gerard, el padre Vázquez es considerado por su familia asturiana, por sus hermanos y discípulos como una persona humilde, sabia y de enormes valores, maestro de novicios, denominado por sus superiores como -el eterno suplente-, por su modestia y disposición permanente a afrontar las más arduas tareas que le encomendasen. Fue un hombre sin fronteras y buscó siempre una enseñanza científica y religiosa que vertebrase el diálogo entre fe y cultura.
En esta obra, producto de un riguroso y meritorio trabajo de investigación del padre Manuel Uña Fernández, prior de los dominicos en el convento de La Habana del que el padre Vázquez fue fundamental impulsor, se ofrece una gran historia que recordar y contar y una apasionante historia que construir.
En recuerdo del ilustre dominico, dice el prologuista padre Jorge Cuadros Pastor que -no hay futuro sin pasado, éste es raíz del presente. Debe saberse lo que fue porque lo que está es lo que es-. El padre Vázquez nos ha dejado obras e imágenes en el recuerdo que el autor del libro desbroza y evoca para nítido conocimiento de las generaciones futuras.