¿Qué ocurriría si, en vez de 950 millones de chinos, el mundo contara con 950 millones de alemanes? ¿Una pesadilla? Quizá. Y si los alemanes estuvieran en peligro de extinguirse, ¿arreglaría eso las cosas?. . . Verano de 1980: Harm y Dörte, los profesores