El coro del Maestro Mateo fue construido en torno al año 1200 y demolido en 1603. Gran parte de las piezas se aprovecharon en distintas obras de la misma Catedral y fuera de ella, algunas como simple material de construcción y otras con carácter ornamental, entre las que destacan las figuras que decoran la fachada de la Puerta Santa o la que albergan el Museo Catedralicio y el Museo Arqueológico Nacional. Sin embargo, muchas esculturas y fragmentos escultóricos que formaron parte del Coro se han ido recuperando poco a poco y sus sucesivos hallazgos animaron el deseo, ya manifestado por ilustres investigadores y académicos, de reconstruir en lo posible el coro para evitar la pérdida definitiva de una obra de especial significación para el patrimonio artístico internacional.
-5%
-5%
-5%
-5%
