Teresa tenía diez nietos y un solo regalo para repartir. Así que decidió plantarlo, para ver si daba frutos; sin embargo, los regalos no crecen en los árboles y empieza a desesperarse. Tierna historia que refleja la generosidad y el amor.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información