Tras la muerte de Franco, la burguesía madrileña decide abrirse a gentes de otras clases e ideologías para salvar sus intereses. Necesita vivir una experiencia diferente que le redima de un pasado poco heroico. Se considera romántica y sublime. Un mundo apenas explorado por nuestra literatura, el mundo ensimismado del barrio de Salamanca con sus modas y costumbres, sus comercios y sus centros de reunión y veraneo, habita esta novela donde a través de tres generaciones de mujeres de una familia marcadas por un amor inviable, se repasan los últimos cincuenta años de vida española. -Una novela capaz de apasionar a cualquier lector por muchos caminos distintos.- Almudena Grandes, El País -Se emparentaría con esa gran ficción crepuscular europea que tan hondamente habló de un mundo que reflejaba viejas glorias aristocráticas o militares.- Luis Mateo Díez, El País -Escrita con brillantez en su prosa envolvente, de impecable factura clásica, imaginativa y de altas calidades poéticas.- Angel Basanta, ABC -Está contada como si el canario Benito Pérez Galdós se hubiera reencarnado, pero con más gracia.- Juan Cruz, La Provincia -Algo que se dice en Romanticismo podría servir como lema de la novela: Todo sigue igual. Pero nada es como fue.- Santos Sanz Villanueva, Claroscuro -Novela poderosa, divertida, clásica y a la vez paródica, de madurez e impecable expresividad.- Antón Castro, ABC -Lo que quería parecer el retrato de una clase adormilada en sus prerrogativas, se trueca en una visión de corte histórico y en una explicación de vida.- Ramón Acín, Heraldo de Aragón
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