El método Pyé-Ko Kan-3« tiene sus raíces en la acupuntura y sus puntos reflexoterapéuticos asociados al arte de la escucha y del tacto que la autora describe como -manopresión-, al ser la mano el vector esencial de la relación.
Colette Bacchetta utiliza los dedos como una prolongación de ella misma para detectar las tensiones y las relajaciones en puntos específicos que pertenecen a ramas energéticas clásicas conocidas como meridianos tendinomusculares. Los 106 puntos tendinomusculares (TM) se tratan mediante masajes que podrían calificarse de -psicofísicos- con el objetivo de romper el caparazón musculotendinoso que bloquea la circulación de la energía vital y obtener la armonía de todas las regiones corporales.